Me siento perdido, en una brecha fuera del espacio temporal, rodeado de recuerdos multi-dimensionales que no me dejan escapar, desde el momento en que te fuiste de mi vida nada volvió a ser normal, estoy condenado por tu maldición a con nadie mas poder soñar. Tu veneno fue inyectado por un gusano, que ahora vive en mi, es mi compañero de agonías yo sufro y el me grita que no mas, porque estas tormentas mentales que sufro, también le hacen sufrir, es su condena mantenerme en este estado hasta no poder mas, es un circulo de dolor vicioso en el que nos encerraste para morir. Maldita sea la hora en la que me enamore de tu mirada mentirosa, maldita sea la hora en la que me enamore de tu cuerpo preciosa, porque ahora con querer olvidarte para mi corazón no basta, y con cada día que paso lejos de ti la hora de mi muerte avanza. Te digo esto porque siento que solo conmigo ya no me alcanza. Amor, te puedo decir que todavía entre mis rayes te pienso, y acabo ...
La vida abarca desde el dulce delirio, hasta la amarga realidad.