Sombra Magnánima

Miro al cielo melancólico mientras paseo en busca de un lugar donde solo se escuche el susurro de las hojas en cada paso. Miro al cielo y me quiere hacer llorar. Observo sus colores, sus matices perfectos crepúsculos únicos con los que quebranta mi alma, Rememoran en mi mente la insignificancia de mis fracasos y mis logros, aciertos y desperfectos. Miro al cielo y me quiere hacer llorar, trae entre largos suspiros nubarrones negros que amenazan con inundar esta asquerosa ciudad miro al cielo y creo que me quiere hacer llorar. Una lagrima se le resbala al cielo, me quiere hacer llorar, su melancolía en un instante cubre todo el firmamento la señal para que los incautos corran en busca de su hogar sin darse cuenta que la madre naturaleza nos vino a perdonar. Caen una tras otra mis lagrimas y las del cielo entristecido su gris presencia me entristece y rompe el corazón no entiendo porque las nubes se están quebrando, no entiendo porque lloro ...

Te amo, te amo, te amo, Es mi deseo gritarlo al cielo, que lo escuche el mundo entero. Que sepa que por encima de todo, yo te amo. Te amo y amo tu mirada, amo nuestras manos en un beso entrelazadas, amo tu son risa cuando a mis ojos miras, amo como cuando al despedirnos tu suspiras. Te amo tanto, que tus males aprendí a amar, amo nuestras diferencias y discusiones, amo tus mentiras, celos y decepciones. Amo cuando peleamos pues con cada riña, se que nuestro amor se fortalece, mi niña. Te amo y te amare por siempre, te amo aunque cuando llore siempre me dejes, te amo aunque tu no me ames, te amo aunque ya no nos veamos en nuestro viaje. Te digo adiós amada mía, te digo hasta nunca, aunque mi vida se maldiga. Se que nunca encontrare a alguien como tu, se que nunca amare a nadie mas, como ahora lo haces tu. Por: Solo Andres.

En caso contrario, simplemente déjalo ir, pues solo estorbara en tu camino, trayendo decepciones y dolor. Pues cuando obligas a alguien a estar contigo, en los momentos difíciles no tendrás un hombro en el que llorar.

Lloras en silencio para que nadie te escuche, pues a ninguno le interesa cuanto dolor guardes en tu corazón. Ruegas ahora y siempre, por un poco de cariño, mas una voz de auxilio nunca escucharas.  Por: Solo Andres.