Ese curioso deseo de querer ir mas allá de tus limites,
piloteo este aeroplano que viaja en la tormenta que emites,
pero creo que es inevitable en algún momento caeré,
dentro de ti cielo, y nadare en tu olas de incontenible placer.
Nunca imagine encontrarme en esta situación mi amor
pero esta noche te arrancare de la piel todo rastro de pudor,
al final entre tu piel y la mía solo abra lugar para el sudor,
seremos uno en un instante de espacio de placer sin control.
Tomare tu rostro, para besarte y decirte ebrio que te amo,
ebrio de placer que me hace creer en lo que hablo,
pero mientras eres mía juro que siento tan real ese vocablo,
pensamientos que se esfuman al escuchar tus gemidos ahogados.
Tu sexo se funde en un exquisita sinfonía con el mio,
donde tus gemidos son el sonido mas bello jamas emitido,
producto del placer en cada nota que juntos compusimos.
Podría morir y no te miento, en el momento al ver tu cuerpo
arqueado de placer en la bella sincronía de llegar al tiempo,
tu uñas en mi espalda que avivan las cenizas de nuestra guerra
que seguirá hasta que nuestros cuerpos extasiados reclamen tregua.
Por: Solo Andres.