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Belleza

Labios hechos de la más suave seda, sin querer en ellos mi mirada se enreda. Tartamudeo cusa de mi mente nublada, por tu belleza venus latina, esta abrumada. "Tus ojos son el café que me desvela", cita una pared de esta ciudad en vela, Eres lluvia para esa seca y perdida tierra, maltratada por tanto en el amor errar. No sé cómo calmar mi cabeza confundida, hace tiempo que tiene miedo a esta partida, donde puedo quedar prendado a ti querida, te digo, esto es lo que más le temo en la vida. Este frágil Tenorio se convierte en Romeo, ante los encantos del cuerpo del deseo. Tu perfecta piel se convierte en un sueño, del que añoro prontamente ser el dueño. Musa divinidad de los poetas encarnada, princesa de esos cuentos infantiles estas fugada. Cientos de príncipes azules pasan por tu morada, y yo solo tengo un verso para dejarte prendada. Tu tan perfecta dama y yo tan sucio pirata, ¿Sera que haremos realidad esa historias en cin

Ser para ti.

Qué difícil es cuando tú mismo no eres suficiente, tristeza invade mi corazón por un ser indiferente, porque al parecer no le interesa lo que pasa por mi mente, sé que sus palabras de compresión en realidad mienten. Mírame con esos ojos impregnados de coraje, porque un día me hice un estúpido tatuaje. Solo por eso mis sentimientos ignoraste, y a tu intolerancia sin sentido me condenaste. Yo te amo la verdad, pero que difícil me lo pones a diario, confundes mi forma de ser con intenciones de acerté daño. No lo entiendo trato de ser lo mejor de mi cada día en vano. Tu sabes que no es porque fume o beba a destajo, es porque en lo que soñabas para mi futuro no trabajo. Me condenas por ser yo mismo contigo y no un falso, ya no sé cómo sentirme bien si todo lo que debo ser es falso. Ya para de gritarme solo por lo que queda esta triste noche, estoy tan hecho mierda que no aguanto más tu reproche. Quieres ayudarme destruyendo todo por lo que luche, tú forma de protegerme está haciendo qu

Me siento raro.

Raro, incomodo conmigo pues me siento raro, no sé el porqué de este sentimiento avaro, que me quita la paz para hacerse nido en mí, quitándome todo placer, y la capacidad de dormir. Hablo con las personas pero con ninguno me entiendo, este sin sabor permanente ante todo no lo comprendo, aburrido de la vida, que se pare un segundo le pido, porque todo lo que hago o pienso me parece estúpido. Trato de escribir estas palabras para quitarme el malestar, pero no funciona no se me ocurre que debo plasmar, solo siento incomodidad bajo esta piel que me apisona, donde me siento más esclavo del dinero que persona. Quizás sea la sociedad con sus cítrico sabor a diario, a lo mejor es cosa de la edad o de la gente de mi barrio, hay algo en el ambiente que me hace sentir entre barro, sucio e insípido me siento, como el sabor de un mal cigarro. Estoy cansado, desgastado de llevar este peso en la espalda no lo pedí, nunca desee tener esta cabeza tan abrumada. Lo que me e

La maestría de dios.

Estoy pensado en aquello que amo mas que nada del hombre, magnifica belleza vista por quien su alma ante ella abre, perfección plasmada en folios, tarimas o fundida en cobre, lugar donde corazones de piedra se vuelven vulnerables. Noble labor del artista que convierte la vida diaria, en una pintura como en un tiempo Van Gogh haría, en exquisita música como Cerati o Beethoven un día, o en versos inmortales como los que Neruda escribía. Plasmando infiernos propios y ajenos para crea vida, aveces transcribe el amor inspirado por aquellas musas mientras otros plasman la psicosis de su pesadilla, o revelando como en otro punto hay hambruna. Valientes exponentes de la maestría divina, aquellos que expresan aquello que los agobia, esos pensamientos que nadie se imagina, pero todos tienen en algún momento de su vida. Amor, miedo, felicidad, tristeza o revolución, sentimientos y expresiones que nos llenan de pasión, así como ese movimiento que genera

Desamor

Recuerdo los besos de aquellas ninfas urbanas, musas con las que pase noches estrenas, bajo la luz de la luna brindando entre sus piernas. Eran una promesa de paz en tiempo de guerras. Pero que corto se hace su paraíso terrenal, nada es suficiente cuando se es mortal, cuando todo lo que te rodea no parece cambiar y el gris en tu interior no se quiere despejar. Ya no me esfuerzo en mantener el amor de bellezas de pasarela que no valoran todo lo que te esfuerzas, en hacerlas feliz pues ella prefiere que le regales salidas, un bolso chanel en ves de una mañana entre las cobijas. No quiero generalizar en este melancólico poema, el dolor es el que habla pues no tolera sus maneras, no supe en que momento nuestro amor entro en coma, te fuiste dejándome el desconsuelo y heridas abiertas. Sufrí por aquellas féminas causa de inspiración, todas ellas me dejaron con mi amada depresión la única que me acompaña en mi desconsolación, por lo que dure la resaca del amor y su

Malandro marioneta.

Terror siembran en las calles malandros, que se creen malos pero son solo mas esclavos, de este sistema que los necesita "trabajando" para tener a los demás ciudadanos asustados. El problema mayor para estas hermosas calles, es que en ellas se esconden los títeres de ladrones que esperan una nueva victima en los callejones, No saben que su practica les impide ser mejores. Ciegos no saben que son parte de un mayor negocio, que mantiene a tombos y otros funcionarios en su ocio, viven de los impuestos que pagas aunque no quieras socio. Con ese dinero que ellos te roban comenzarías un negocio. Pero eso no te importa pues vives en la ignorancia, mas no es tu culpa ellos te educaron a la vagancia, desde que naciste decidieron tu destino en delincuencia, Borran todos los días con sus telenovelas tu conciencia. Vives convencido que la sociedad no es justa contigo, pero no sabes nada de lo que pasa en realidad amigo. Es su sistema el que eligió tu destino y el de

Triste ciudad.

Tanta soledad siento al mirar afuera ese frió mundo, mi ciudad se llena en las noches de sollozos mudos, y no comprendo porque sufrimos de este modo. Un padre ya anciano abandonado con el tiempo, por sus hijos que viajaron a otros campos, en busca de una mejor vida lejos de aquel viejo, que acepto con valentía la soledad como cobijo. Niños en orfanatos esperando una familia en la mañana, la mayoría descubrirán la realidad de manera insana una realidad donde no tendrán oportunidad alguna, No por qué no lo merezcan, es qué así es la vida urbana. Una madre soltera que aguarda en vela en el sofá que regrese su hijo perdido en las calles a su hogar. Mientras este con sus vicios de la muerte se mofa, jugando a la ruleta rusa con una vida que no supo valorar. Ancianos y niños por las calles caminando vagabundos en las aceras de mi ciudad que sirven de hogar a algunos, esos que sin darse cuenta quedaron de un futuro viudos, por una mala decisión o por cosa de alzar de todo d